Nuevo Léon: Ya son 23 los cuerpos en "narcofosas", halladas ayer

Olor a muerte... es lo que se respira al llegar a la zona conocida como Hacienda Calderón, en el municipio de Juárez, Nuevo León.

Hasta el momento han sido ubicadas por parte de las autoridades al menos siete fosas clandestinas y rescatados 23 cuerpos y tres bolsas con restos humanos, de personas que han sido asesinadas a balazos en Monterrey y la zona metropolitana, por un grupo delictivo.

Son 22 cuerpos de hombres y uno de una mujer.

Una llamada anónima alertó desde el pasado jueves a los elementos de la Séptima Zona Militar, de que en ese sitio se encontraba algo ilícito.

Al llegar al lugar, los soldados ubicaron zonas cubiertas por ramas ya secas, esas que no enverdecieron por las recientes lluvias del huracán "Alex", y esa fue la pista clave.

Cuando las autoridades utilizaron la retroexcavadora, se dieron cuenta del macabro hallazgo: cadáveres de varias personas.

Aparentemente varios individuos de un grupo delictivo utilizaron la misma técnica para cavar los pozos y colocar ahí a sus víctimas, todos hombres, la mayoría con tatuajes en sus brazos o espalda.

Los olores fétidos son insoportables en el lugar, por eso, se utiliza el equipo especial de cubrebocas para poder estar durante horas en ese sitio.

Personal de Servicios Periciales de la Procuraduría de Justicia, ha logrado sacar hasta esta noche, al menos 18 cadáveres y las tres bolsas con restos calcinados, lo que sumaría 21 personas ultimadas con arma de fuego.

Desde el jueves se hizo el hallazgo de siete cuerpos en las fosas que se encuentran en un sitio utilizado como relleno sanitario por la citada municipalidad, el cual tiene un perímetro de unos dos mil metros cuadrados.

Presuntamente los homicidas asesinaban a sus víctimas en ese sitio, recogían los casquillos y luego lanzaban los cuerpos a las fosas, según informes del Ejército Mexicano.

El lugar permanece resguardado por los soldados, quienes a pie y en camionetas buscan más pozos en este lugar utilizado como un cementerio clandestino.

De esta manera, algunas personas acudieron al anfiteatro del Hospital Universitario donde los cadáveres están ya listos para ser reconocidos por sus seres queridos, aquellos que denunciaron la desaparición de algún familiar. Y aún falta por cavar cuatro fosas más.