La policía investigadora presume que el cuerpo pudo haber sido arrojado desde un vehículo en movimiento, ya que no se encontró huella de pisada de calzado en el escenario.
Se trata de una persona no mayor a los 25 años de edad, de tez blanca, complexión delgada, de 1.70 de estatura, así como vestía camisa de color blanco, pantalón azul de mezclilla, cinto café piteado y calzaba tenis “converse” negros.
Alrededor de las siete de la mañana de este miércoles, cuerpos policiacos fueron alertados sobre una persona “ejecutada”, tirada a un costado de las bombas de Japac, a la orilla del río Tamazula, a espaldas de conocido salón de fiestas.
Patrulleros locales fueron los primeros en llegar al escenario y detectaron el cuerpo de un joven, boca arriba, sujetado de pies y manos con cinta industrial “canela”.
El cadáver tenía la cabeza tapada con la misma cinta y se le apreciaban orificios de bala en la misma.
Policías de homicidios localizaron a un costado del cuerpo, 10 casquillos de calibre .9 milímetros, mismos que fueron enviados al departamento de criminalística para su estudio de ley.
Correspondió a un asistente de la primera fiscalía especializadas en homicidios dolosos dar fe e inspección ministerial de los hechos, así como ordenar que el cadáver fuera enviado al anfiteatro de la PGJE para su necropsia de ley.
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